El interés de Enrique Alcatena (Buenos Aires, 1957) por las historietas es desde pequeño. Es dibujante, historietista autodidacta con más de treinta años de experiencia. Sus influencias han sido  Carmine Infantino, Gil Kane, Jack Kirby, Lucho Olivera y Barry Windsor   Smith. Le fascinan las criaturas  y monstruos del mar así como también sus mitos y leyendas. Trabajó para  Chiche Medrano, para Ediciones Récord,  revista  Anteojito. Publicó para el Reino Unido una serie de revistas de la editorial Thompson, fue colaborador de la línea Starblazer, (libros de ciencia ficción y fantasía). En 1987 volvió a colaborar con Récord. Con guión de Ricardo Barreiro, hizo los dibujos de La fortaleza móvil. Junto al mismo guionista también realizó El mago y El mundo subterráneo. Luego trabajaría junto a Eduardo Mazzitelli (PesadillasAcero liquidoTravesía por el desierto) y Walter Slavich (Soldados de piedra y Kairak. Colaboró para la editorial norteamericana Marvel, primero como entintador de la serie Hawkworld y más tarde como dibujante de Conan el Bárbaro, dibujó en la revista Skorpio. También realizó a los conocidos personajes: SupermanBatmanLos cuatro fantasticos. Su impecable trayectoria le permitió publicar sus asombrosos trabajos en Francia, Italia, India…
¿A qué edad ya sabías que lo tuyo era la ilustración?
Creo que apenas aprendí a leer historietas, descubrí que mi mundo estaba ahí.
¿Cómo te iniciaste en la ilustración?
De la forma en la que todos los que estamos en esto nos iniciamos: dibujando compulsivamente día y noche hasta que en un momento de arrojo nos animamos a salir al ruedo, y tratar de vivir de esto.
¿Te imaginaste alguna vez que realizarías personajes de semejante magnitud?
Si por personajes de magnitud te referís a íconos como Batman, o los Cuatro fantásticos, etc., fue un poco como darle el gusto al chico que fui, al chico que adoraba a esas entrañables invenciones, y que de grande no ha dejado de quererlas. Pero mis preferencias a la hora de contar historias con dibujos, de adulto, en realidad iban para otro  lado.
¿Por qué la mayoría de tus trabajos se fundan en la ficción?
Porque la capacidad de fabular es inagotable, y enciende la imaginación.
¿Cuáles eran/son tus superhéroes favoritos?
Muchos, algunos de los cuales llegué a dibujar, como Batman, Flash  y Linterna Verde, y otros que quedaron en el tintero.
¿Te costó desprenderte de cada personaje?
Si hablamos de los personajes que he creado ( y ya no de los mencionados anteriormente, que fueron concebidos por otros), están todos presentes en mi cabeza, vivitos y coleando, protagonizando otras historias que aguardan ser plasmadas en el papel tal vez algún día.
¿Qué te dicen tus admiradores ?
Los admiradores suelen ser muy indulgentes conmigo.
¿Qué pensas que te faltó ilustrar?
Son muchísimas las cosas que aun tengo por dibujar, muchísimas las  historias que un están por contarse. Nunca, nunca acaban.
¿Qué opinión tienes de los ilustradores contemporáneos?
Hay muchísimos artistas talentosos, como siempre los ha habido.
 ¿Qué estas ilustrando ahora?
Con guiones de mi compañero de ruta y socio creativo desde hace más de veinte años, Eduardo Mazzitelli, estoy dibujando las aventuras de Lord Hexmoor, un dandy de principios del siglo XIX, con algo de  Byron.
¿Qué ilustraciones tenés para este año?
No suelo planificar con mucha antelación mi actividad; nunca lo he hecho. Nuestro trabajo es bastante azaroso, y uno se acostumbra a vivir con ciertos riesgos.
¿Cuál es el personaje creado por vos que más admiras y te sentís orgulloso?
No hay uno solo que quiera sobre el resto. Es como preguntarle a un padre a qué hijo quiere más.
¿Qué libro te gustaría ilustrar?
Muchos. Pero también, justamente ahora, estoy realizando con el escritor indio Ashok Banker una adaptación en historieta del Ramayana, una de las grandes epopeyas hindúes, que siempre ha sido uno de mis libros preferidos.

¿Podrías contarme sobre esa fascinación que tienes con los piratas y las criaturas de mar?

Desde que leí La Isla del Tesoro, allá lejos y hace tiempo, caí bajo el embrujo de las historias de piratas y de aquellas ambientadas en el mar, como Moby Dick. Y mi pasión por los monstruos, sean de tierra, aire o mar, es total.
¿Alguna experiencia que te haya marcado en tu estilo y desarrollo con otro  artista?
Mencioné antes mis colaboraciones con Eduardo Mazzitelli. Eduardo es quien más me ha ayudado, con sus relatos, a desarrollarme como artista.
¿Cómo te inspiras a la hora de crear un personaje?
Suelen aparecer ya completos, enteros, con un aspecto y personalidad definidas, como si en vez de ser pergeñados en mi cabeza, hubieran irrumpido en ella desde algún lugar misterioso e insondable. Vaya uno a saber…
¿Cuáles son los procedimientos básicos para desarrollar un personaje?
Son las acciones las que definen a un personaje. Todo eso lo vamos perfilando con Eduardo en largas charlas de café (antes) o por mail (ahora). Internet nos ha vuelto más sedentarios.
¿Qué te diferencia de otros ilustradores? ,¿Sus principales características?
Todo artista busca un estilo, lo que, por otra parte, es algo inevitable: el estilo resulta de miríadas de pequeñas elecciones y  descartes, así como de naturales limitaciones. Yo he aprendido de muchísimos artistas, aunque siempre traté de no copiar a ninguno. Paradójicamente, de cuantos más artistas hayas abrevado, más personal resultará tu estilo.
¿Cómo imaginas tu futuro?
Si los dioses me sonríen, dibujando. 
En pasos rápidos y fáciles para comenzar unos dibujos: podrías dar un consejo para quienes quieren iniciarse en esto.
No hay secretos: aquel que quiera ser dibujante, deberá dibujar, con pasión, con autocrítica, sin desmayo, sin impaciencia. La palabra clave es disciplina.