Foto de Eugen  Richards

-Tengo la sensación  de  que usted se pirra por todo lo que no le atañe.

-¿Qué hacer? Soy hombre. Lo que equivale a decir que hago cosas inútiles.

-¿Observa de vez  en cuando a los animales, Doctor?

-Mucho menos que a los individuos de  nuestra especie.

-Yo les miro con bastante frecuencia. ¿Y sabe lo que me ha parecido notar?

-He creído notar…y eso nos devuelve de golpe a su mal. Al mal de la actividad.

-Lo había notado… Además, había notado lo mismo en los niños. Esos  seres,  mi querido Doctor, no tienen el mal de la actividad.

-¿Pero a que niños  ve usted? Los pequeños que se portan bien son unos revoltosos, unos diablos. Intente que se  queden tranquilos! ¡Qué monstruos!…Si ven  un grifo lo hacen girar; si es una  campanilla la tocan. A falta de campanilla ¡se tocan la nariz! Activan, manipulan y ponen en funcionamiento todo lo que encuentran a mano…¡Si eso no es  una  forma aguda del mal de  la actividad!

–Pues no… Lo único que quieren es oírse. Ese tipo de actividad solo es un mal para los padres, los relojes, los hermosos libros de ilustraciones y el filósofo del  piso de arriba. Es un bien para ellos. Por eso digo que ni los niños  ni los animales pueden hacer nada inútil.

Paúl Valéry. La  idea fija

Paúl Valéry

Paul Valéry  fue un escritor, filosofo, poeta y ensayista francés que nació    en 1871 y falleció en  1945