Julie Hayden, autora de «Las listas del pasado» que publica Muñeca infinita
El nacimiento de una nueva editorial siempre es una buena noticia para los amantes de los libros pues, en principio, ayuda a la diversidad del espacio literario. Sin embargo, también tiene otros aspectos menos optimistas, empezando por la supervivencia del sello, tarea harto compleja en un panorama donde la oferta supera a la demanda. En cualquier caso, hemos querido preguntar a la persona que ha tomado esta iniciativa, Juan Pablo Díaz Chorne (Buenos Aires, 1975) para que responda a nuestras preguntas sobre esta nueva apuesta editorial.
Crear una editorial nueva en este momento exige, cuanto menos, valor, cierta independencia económica y sentido crítico, ¿estás de acuerdo?
Sin duda. Por un lado, los avances tecnológicos han hecho que crear una nueva editorial sea relativamente barato (al menos comparado con otros negocios), pero al mismo tiempo su supervivencia en el mediano y largo plazo es cada día más complicada. Muchos son los llamados y pocos los elegidos. Uno de mis maestros en el oficio solía decir que para montar una editorial «había que ser catalán o rico». Más allá de la boutade, como para casi cualquier cosa, un capital inicial es necesario, lo importante es qué hacer con él. Todas las semanas llegan a las librerías muchísimos nuevos libros y muchos de ellos son fantásticos, cada vez hay más editoriales pequeñas, medianas y grandes que lo hacen muy bien, así que el reto para la supervivencia está en captar la atención y el interés del lector entre tanta oferta hasta el punto de que quiera adquirir uno de tus títulos. A fin de cuentas, el éxito de una nueva editorial se reduce a lograr algo que se dice muy rápido pero es muy difícil de hacer, una comunidad de interés que siga tus publicaciones y se fíe de tu criterio. Construir un espacio y una comunidad desde los que compartir libros que se consideran importantes.
En tu caso, ¿a que se debe este nacimiento?
Prosaicamente, te diré que a un despido imprevisto en la segunda semana de confinamiento de la pandemia y a encontrarme en una nueva posición en la que no tenía tanto que perder. Profundizando un poco; a cumplir una fantasía que tenía hace tiempo, a pensar que ha llegado el momento en que estoy preparado para cumplirla (y que casi es un ahora o nunca), y a cierta necesaria ilusión e inconsciencia. Llevo tiempo trabajando en el sector del libro y sé dónde me meto, con todo lo bueno y malo que tiene eso.
¿Qué puede aportar tu editorial al mundo de los libros?
No querría pecar de soberbia. Espero aportar algunos pocos y buenos libros que no han tenido la oportunidad de ser conocidos en nuestro idioma. Algo que ya sé que hacen, y bien, muchas otras editoriales. Lo que sí tengo muy claro es que querría que cada uno de nuestros títulos fuera considerado como necesario y como pertinente para hablarle a nuestra época de los temas que a todos nos conciernen. Vamos a intentar construir nuestro catálogo como un conjunto coherente e interrelacionado de títulos, una casa para nuestros lectores, pero eso, claro, se consigue con el tiempo y las ideas claras.
¿Cuál va a ser la línea editorial?
Al menos en un primer momento nos centraremos en lo que se suele llamar rescates editoriales. ¿Por qué? Porque nos permiten acceder a libros muy buenos, decantados por el paso del tiempo y en los que la competencia por su contratación no es tan grande. El perfil de la editorial es literario, con cierta especialización en la narrativa memorialística, ese extraño cruce entre ficción y autobiografía (no somos muy amigos de la hiperespecialización si te lleva al aislamiento y al ensimismamiento). Sobre todo, editaremos rescates de clásicos modernos: libros desaparecidos del mercado pero que merecen una segunda vida, pero sobre todo otros que nunca aparecieron en nuestro idioma. También estaremos pendientes de nuevas voces que merezcan atención, pero antes de pelearnos en el ring de las novedades y subastas al mejor postor, iremos a rescatar esa joya escondida en el último anaquel de la librería de segunda mano, sorprendentemente todavía no recuperada.
¿Cuál es el origen del nombre?
Es un nombre que nos parecía que resonaba bien para trasladar la idea que queríamos trasladar con la editorial. Esta idea de la muñeca sin fin, del laberinto, de la huella. Aspiramos a que en nuestro catálogo los libros se encuentren y encajen unos con otros, a que lleven en su interior otros libros y otras lecturas. Nuestro lema viene a ser: Porque hay muchos libros dentro de cada libro, y muchos lectores dentro de cada lector.
Primeros títulos: Folleto_muneca_infinita_pliegos
Juan Pablo Díaz Chorne (Buenos Aires, 1975) es licenciado en Filología Francesa por la UCM, y ha realizado un máster en Literatura Comparada y otro en Gestión Cultural. Ha vivido en Francia e Italia y en la actualidad reside en Madrid. Ha trabajado como editor, profesor, traductor y librero, y es el fundador de la editorial Muñeca Infinita. Ha publicado junto a David de las Heras, el libro Político Animal en Sexto Piso
https://www.todostuslibros.com/libros/politico-animal_978-84-18342-47-9